Imitando a los gobios, escualos y otros blenios, el ROCKSTAR es ante todo un temible manjar. Su goma tónica, combinada con su enorme aleta caudal, le confieren una potente vibración, bastante impresionante para un señuelo que sigue siendo de pequeño tamaño. La forma de su cuerpo y sus grandes aletas pectorales confieren al señuelo estabilidad cuando se detiene en el fondo, y un importante desplazamiento del agua al tirar (lo que facilita su localización por parte de los depredadores). La Rockstar está equipada con el concepto SBC (Sugar Belly Concept) para optimizar el uso del atrayente. ¡Durante las pruebas, demostró ser muy eficaz con grandes percas y luciospercas, tanto en posición lineal como vertical (¡que era nuestro objetivo!) pero nos sorprendió por su eficacia con grandes truchas en grandes ríos y con lubinas en estuarios y desde la orilla! Sabor a anís.
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